DRA. GIBERT

ECOGRAFÍAS Y MAMOGRAFÍAS: ¿cuándo están indicadas?

Autora: Dra. MJ Gibert.
Fecha de actualización: 16/6/22.
Fechas de versiones previas: 13/3/21.

La mama se estudia mediante palpación en la consulta y pruebas de imagen (mamografía, ecografía y resonancia magnética).

El cribado del cáncer de mama consiste en realizar mamografías cada dos añosentre los 50 y los 69 años, con la finalidad de un diagnóstico precoz. Gracias a ello, la mayoría de los cánceres que se diagnostican en la actualidad no son palpables, esto es, miden 1 cm o menos.

  1. Un nódulo en la mama.
  2. Una asimetría de densidad o textura de los pechos.
  3. Un bulto en la axila.
  4. Secreción mamaria.

Si ello os ocurre, se os realizará una exploración sistemática de ambos pechos y de sus territorios de drenaje ganglionar, que son la axila y la fosa supraclavicular. Llegados aquí, vuestro médico ya tendrá una idea de vuestro problema.

En nuestra consulta, en seguida os hacemos una ecografía, porque la tenemos muy a mano. La imagen ecográfica nos saca de dudas sobre si el tumor es líquido (un quiste) o sólido.

 


La ecografía complementa la mamografía y se usa más en mujeres jóvenes y en las de cualquier edad con mama densa


 

En el último caso, hay una serie de características como la ecodensidad del tumor (escalas de grises y su distribución), sus bordes, si absorbe los ultrasonidos, si retrae el tejido de alrededor, si tiene un halo blanco, si su eje es paralelo o perpendicular a la piel o si capta flujo sanguíneo o no. Ello nos orienta hacia la benignidad o malignidad.

Hasta los 30-35 años, solemos preferir la ecografía, pues las mamas aún son muy fibrosas y salen blancas en la mamografía. Como los tumores también son blancos, nos sale una imagen de “blanco sobre blanco” que es poco informativa, por la similitud de color entre el tejido normal y el tumoral. Si la mujer está embarazada o hace menos de un año que se ha hecho una mamografía, también preferimos empezar con la ecografía. Al contrario, si hay sospecha de malignidad, siempre acabaremos añadiendo una mamografía. En cambio, en las mujeres de más de 35-40 años empezamos con una mamografía y, más adelante, ya decidiremos si le indicamos o no una ecografía.

En cualquier caso, cuando tenemos el informe de la prueba de imagen en nuestras manos, leemos el término BI-RADS seguido de un número. Este método, que es el acrónimo de Breast Imaging Reporting and Data System, expresión difícil de traducir al castellano y que significa más o menos Sistema de Datos y de cómo informar las Pruebas de Imagen de la Mama, permite que todos los médicos sepamos a qué atenernos en cuanto al manejo de los hallazgos en las pruebas de imagen de la mama, ya sean ecografías, mamografías o resonancias.

 


El sistema BIRADS hace posible que todos los profesionales interpretemos y manejemos las lesiones mamarias de una forma semejante


 

En la tabla que sigue os explicamos a qué corresponden los diferentes valores.

A partir de ahora, ya no tendréis duda a la hora de interpretar los informes de las imágenes de la mama, sean vuestras o de la gente de vuestro entorno.

 

FUENTES DE LA INFORMACIÓN: