DRA. GIBERT

¿Demasiadas mamografías?

17 marzo, 2014

tn_170_170_27_04_1422_45_29Massa_mamografiesLas mamografías rutinarias para la detección precoz de cáncer de mama son un asunto controvertido, pues se necesitan estudios con muchas participantes y de larga duración que confirmen de forma inequívoca que la mortalidad por cáncer de mama es sustancialmente inferior en las mujeres sometidas a mamografías. Otro escollo es separar el efecto sobre la supervivencia de las mamografías del relacionado con los tratamientos actuales del cáncer de mama, mucho más efectivos que los de hace unas décadas. Por tanto, la comparación de grupos contemporáneos de mujeres con mamografía y sin mamografía nos dará una información mucho menos sesgada o “contaminada” que si comparamos la supervivencia de grupos de mujeres sin mamografía de hace 20 años (tratamientos peores del cáncer de mama) con mujeres que se hacen mamografías periódicas en la actualidad (tratamientos mejores).

El estudio publicado el 11 de febrero de 2014 en el British Medical Journal salva los obstáculos antedichos: casi 90.000 mujeres canadienses, seguidas durante 25 años, asignadas al azar a un grupo con mamografía y a otro sin ellas. Al iniciar su participación en el estudio, todas fueron sometidas a una exploración mamaria para descartar tumores palpables y se las instruyó sobre la autoexploración mamaria. A partir de ahí, el manejo fue diferente según los grupos de edad, así, las que tenían entre 40 y 49 años al iniciar su participación (50.000 aproximadamente) podían ser asignadas a un grupo con controles habituales a discreción de su médico de familia o a un grupo con cuatro mamografías y exploraciones mamarias anuales. Las de 50-59 años (unas 40.000) se sometían a una exploración mamaria anual sin mamografía o bien a cuatro mamografías anuales acompañadas de sendas exploraciones.

Durante todo el periodo de estudio, 3.250 mujeres de 44.925 en el brazo de la mamografía y 3.133 de 44.910 en el brazo sin mamografía fueron diagnosticadas de cáncer de mama, mientras que 500 en el primer grupo y 505 en el grupo sin mamografía fallecieron a consecuencia de su cáncer de mama.

En los últimos 15 años de seguimiento, se observó un exceso de 106 cánceres innecesariamente diagnosticados en el grupo de la mamografia, se les llamó así pues eran cánceres de mama que presumiblemente no hubieran causado la muerte de la mujer de no haberse diagnosticado. Se concluye, por tanto, que la mamografía en mujeres entre 40 y 59 años no reduce más la mortalidad que la exploración mamaria realizada por un profesional de la Ginecología y/o por la paciente.

Fuente: British Medical Journal