DRA. GIBERT

La financiación pública de anticonceptivos reversibles de alta eficacia reduce drásticamente los embarazos adolescentes

16 octubre, 2014

tn_170_170_16_10_1423_58_18El_financament_public_dels_LARCs_redueix_drasticament_els_embarassos_adolescentsComo ustedes saben, el no poder derogar la Ley Orgánica 2/2010 de Salud Sexual y Reproductiva ha propiciado la dimisión del anterior Ministro de Justicia, Sr. Gallardón. Mucho se ha hablado durante estos meses del aborto provocado, de si las menores de edad podrían decidir, de cuáles serían los casos en los que se permitiría, etc., etc., y poco se ha hablado de cómo evitar su causa mayoritaria: los embarazos no deseados.

La prevención de los embarazos imprevistos tiene múltiples facetas. Si nos centramos en las adolescentes, pues unas familias optarán por educarlas en la abstinencia, mientras que otras querrán aconsejarlas sobre los métodos anticonceptivos más adecuados, que serán aquellos que eviten, además de un embarazo imprevisto, una enfermedad de transmisión sexual. Los profesionales sanitarios no debemos interferir en la educación que cada familia ha escogido para sus hijos, pero sí que debemos dar a conocer que el inicio precoz de las relaciones sexuales y/o tener muchas parejas o parejas promiscuas favorece las enfermedades de transmisión sexual (sífilis, hepatitis, SIDA, esterilidad, cáncer de cuello uterino) y aumenta las posibilidades de embarazo. En definitiva, si el adolescente decide iniciar sus relaciones, debe hacerlo responsablemente, poniendo las barreras adecuadas para evitar en la medida de lo posible los “daños colaterales”.

Un artículo del 2 de octubre, publicado en el New England Journal of Medicine se hace eco de la gran cantidad de embarazos entre las adolescentes estadounidenses y aunque sus cifras son muy superiores a las nuestras, sus propuestas son de plena aplicación en nuestro país. Recordemos que en España unas 13 de cada mil mujeres menores de 20 años aborta cada año y una cifra similar de mujeres decidirán tener a sus hijos, con las consecuencias negativas sociales y económicas tanto para el nuevo hijo como para su joven madre.

Para atajar este problema, los investigadores pusieron en marcha un estudio prospectivo de cohortes llamado CHOICE que favorecía el uso de métodos anticonceptivos reversibles y de larga duración (dispositivos intrauterinos e implantes subcutáneos) entre las adolescentes. Los métodos se explicaban y se administraban, si éste era el deseo de la mujer, sin coste alguno. Se siguió a las participantes entre 2 y 3 años, hallándose que: de las 1.404 mujeres, 72% escogieron los LARC y el 28% restante otros métodos. Durante el período de estudio (2008-13), las tasas medias anuales de embarazo, nacimiento y aborto voluntario entre las participantes fueron de  fueron de 34, 19 y 10 por 1.000 participantes frente a  las cifras de 169, 94 y 42 por cada 1.000 estadounidenses sexualmente activas no participantes en el proyecto.

La conclusión es inevitable: la educación sobre los métodos anticonceptivos más efectivos, los LARC, y el proporcionarlos sin coste evitan abortos voluntarios y embarazos no deseados. Desearíamos que tanto el Gobierno Español como nuestros profesionales sanitarios (ginecólogos, matronas, médicos de familia…) tomaran buena cuenta de ello y fomentaran los LARC entre las mujeres sexualmente activas. La crisis económica hace que muchas parejas se decanten por métodos que inicialmente son más económicos (preservativos, pastillas anticonceptivas) aunque sean mucho menos efectivos y, además, más caros a largo plazo (aquí se cumple aquello de que “lo barato sale caro”). El Sistema Nacional de Salud Español hace un importante descuento en implantes subcutáneos (Implanón®), pero no lo hace en los dispositivos intrauterinos. Si los profesionales hiciéramos mejor nuestro trabajo y el Gobierno mejorara la financiación, es muy probable que la práctica del aborto voluntario disminuyera apreciablemente.

Les adjuntamos un vídeo procedente de la misma revista que ha publicado el estudio y que nos ha parecido ameno e ilustrativo. Como está en inglés, los adolescentes pueden aprovechar para practicar el idioma. Y si les queda alguna duda, pueden consultar nuestra tabla sobre la eficacia de los anticonceptivos.

Fuente: The New England Journal of Medicine